Quiero que sepas que para mis ojos
Eres hermosa
Como la sequía que precede a la lluvia
con sus hojas caídas
Con sus arboles tintados de oro
y su luz amarilla
O como la rama que guarda la vida
Después del otoño
Eres hermosa como la noche invasiva
Y tan llena de sombras
Con su lóbrega quietud misteriosa
y sus astros distantes
Como el oscuro horizonte nocturno
que todo lo funde
O como las septentrionales estrellas
Que iluminan el hielo
Eres hermosa, como las tardes lluviosas
Pero llenas de vida
Como la gota que en la piedra se oculta
y que forma la cueva
O como el agua que engulle la tierra
y germina la rosa
No hay comentarios:
Publicar un comentario